Una mujer del municipio vigués de Nigrán, en Pontevedra, se sorprendió cuando recibió en su domicilio una notificación de sanción que ascendía a los mil euros el pasado mes de noviembre de 2015. El motivo se remonta a julio de 2015, cuando no presentó su DNI ante las autoridades en un primer momento cuando éstas se lo solicitaron, ya que no lo llevaba encima. Unas amigas fueron a su casa a recogerlo y lo trajeron al lugar donde se encontraba la perjucada con la policía, y de esta manera pudo atender a la petición de las autoridades. Pero incluso después de haber presentado el documento ante los agentes recibió una sanción de 1.000 euros.
La perjudicada recurrió la elevada multa, y el juzgado de lo contencioso administrativo número 1 de Vigo le dio la razón. Según publica 'La Voz de Galicia', el juzgado publicó una sentencia firme en la cual se obliga al Estado a devolver el importe de la sanción que la mujer abonó en su momento, y también le impone el pago de las costas del juicio.
Según refleja el acta policial, una patrulla se personó una madrugada en julio de 2015 en las proximidades de un centro cultural después de haber recibido quejas de los vecinos por ruido. Allí se estaba celebrando una reunión motera bajo una carpa de concierto. Los agentes solicitó los permisos y la identidad de la persona organizadora, a lo cual respondió la demandada, que no llevaba consigo su DNI. En la denuncia se señala que la perjudicada mostró reiteradamente su negativa a identificarse, pero el juez aceptó la demanda ya que la identificación se produjo.
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