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Cómo actuar ante un desmayo

Cómo actuar ante un desmayo
  • Con las altas temperaturas y las aglomeraciones es muy común que se desencadenen lipotimias, por lo que hay que saber qué hacer en estos caos

Los desmayos, también conocidos como mareos o lipotimias, se deben usualmente a la falta de riego cerebral. Puede darse por diversos motivos, como por la deshidratación o un atragantamiento, aunque también por otras causas como el abuso de drogas o alguna enfermedad.

Lo ideal cuando ocurre es llamar al servicio de emergencias, especialmente en los casos en los que quien lo sufre es una embarazada, un diabético o una persona de avanzada edad. Además de llamar a emergencias, hay que estar preparado para actuar de manera correcta y con calma, para ayudar en la medida de lo posible a la persona que ha sufrido el desmayo.

Si identificamos síntomas previos

Normalmente, antes de un desmayo notamos algunos síntomas previos que nos avisan de lo que va a ocurrir. Si notamos un mareo más fuerte de lo normal, la vista se no nubla o notamos un zumbido en los oídos, hay que mantenerse alerta porque podríamos desmayarnos.

En estos casos, lo mejor es ayudar a la persona que sufren estos síntomas a tumbarse despacio en el suelo, sin movimientos bruscos y con cuidado. Debemos colocarla boca arriba y en la medida de lo posible los pies deben estar ligeramente más elevados que el resto del cuerpo.

Aflojar las prendas que puedan estar un poco apretadas para facilitar la respiración de la persona en cuestión también es una buena idea, igual que despejar la zona donde se encuentre tumbada para que corra el aire.

Si ya se ha desmayado

Cuando la lipotimia nos pilla desprevenidos, hay que tratar de conservar la calma puesto que es importante actuar con celeridad pero sabiendo qué se hace.

Si la persona afectada está perdiendo el conocimiento, debemos hacerle preguntas fáciles de responder como '¿Cómo te llamas?', '¿Cuántos años tienes?', o '¿Cómo se llaman tus hijos/padres?' para comprobar si se produce un cambio de estado mental.

Por otro lado, hay que controlar las constantes vitales para comprobar que la persona sigue respirando. En caso negativo, hay que proceder rápidamente a la reanimación cardiopulmonar.

Si la persona todavía está un poco consciente o ha recuperado la consciencia, debemos situarla en la posición anteriormente detallada, excepto en los casos en los que sospechemos que la caída provocada por el desmayo puede haberle supuesto algún tipo de lesión grave en cabeza o columna, en cuyos casos es mejor mantenerla en la posición en la que se encuentre y no moverla.

Si tras desmayarse la persona recupera el conocimiento podemos ofrecerle algún dulce o una cocacola para subirle el azúcar.

Que no hacer

Además de saber qué hacer, es importante saber lo que no deberemos hacer en el caso de encontrarnos con un caso de desmayo. Además de no ayudar a la víctima, tomar la decisión equivocada podría agravar su problema y ponerla en peligro.

Si la persona está consciente hay que quedarse junto a ella para tranquilizarla y esperar que lleguen los médicos. Si está inconsciente no hay que darle comida ni bebida, y sobre todo no hay que colocarle una almohada bajo la cabeza. Nunca dejar que la cabeza esté a una altura mayor que los pies, puesto que esto dificultaría todavía más el riego cerebral y podría empeorar mucho su situación.