Si no utilizas a diario la webcam de tu portátil, deberías haberla tapado hace tiempo

La Guardia Civil advierte del peligro y la facilidad con la que algunos programas logran hacerse con el control de las cámaras de los ordenadores

C. BENLLOCH

Desde hace ya algunos años, los expertos alertan del peligro que supone que ciberdelincuentes puedan acceder a la webcam de nuestros portátiles y grabar a través de ella sin que tengamos conocimiento de ello. Por ello recomiendan que, si no se utiliza a diario, se tape la cámara del ordenador con una pequeña pegamos o hasta una tirita para evitar sorpresas desagradables.

Aunque en un primer momento, hace ya varios años, cuando se comenzó a hablar del peligro de que terceros pudieran acceder a las cámaras de los portátiles, no se afirmaba con rotundidad esta posibilidad ya que no existía unanimidad entre los expertos sobre este tema. Pero ahora los especialistas en seguridad informática, a los que también se ha unido la Guardia Civil, recomiendan que se tape esta zona de los ordenadores cuando no se encuentre en uso para evitar posibles intrusiones.

La Guardia Civil ha recordado en numerosas ocasiones a través de su cuenta de Twitter que "la mejor manera de asegurarse que no te ven en cualquier momento por la webcam es tapándola cuando no la estés usando". Según el informe sobre hábitos de seguridad multidispositivo en nuestro país de la empresa de seguridad informática Kaspersky de 2014, un 31% de los españoles ya tenía como costumbre tapar la webcam de sus portátiles. Pese a que esa cifra va en aumento, todavía hay muchas personas que creen que el espionaje a través de la cámara de los ordenadores no es más que un mito. Aunque hay que reconocer que, si sólo tenemos en cuenta a la población de entre 16 y 25 años, esta franja de edad son los más concienciados sobre el problema y ya en 2014 un 50% de ellos acostumbraba a cubrir su webcam, lo que indica que el problema se va corrigiendo poco a poco.

El peligro

El error de base es dar por hecho que la cámara de un portátil no está en funcionamiento si no se enciende el indicador luminoso. Desde Kaspersky aseguran que se trata de una idea totalmente equivocada, y explican que si un ciberdelincuente puede controlar remotamente la webcam también puede controlar otros parámetros de nuestro portátil, evitando que se encienda el testigo luminoso.

Como medida preventiva, tapar la cámara de los ordenadores con una simple pegatina o tirita parece una medida sencilla además de económica, una muy buena opción que puede evitar disgustos o sorpresas desagradables en un futuro.